lunes, 10 de octubre de 2011

"Sí," es otra estúpida pelicula americana

Tranquilos, que no voy a hablaros de la película que lleva el título parecido. Recientemente he visto una de esas películas que los cinéfilos llaman “cine comercial”. Como bien sabrás son aquellas películas que simplemente buscan que el espectador pague una desmesurada cantidad de dinero en taquilla para recaudar algunos millones de dólares. Estas películas no pasaran por los festivales de cine y por supuesto menos aún por la alfombra roja de los Oscars. La película en cuestión es “Friends with benefits” o traducida al español “Amigos con derecho a roce”. Pues bien, te la recomiendo si no eres anti-peliculas-comerciales porque ésta tiene casi todos los tópicos de las comedia-románticas americanas. Mención aparte para Justin Timberlake que se ha pasado algo de tiempo en el gimnasio y Mila Kunis, aysss! Mila… (suspiros…). Pero tampoco voy a hablarte de ésta película sino de que la idea que me vuelve a rondar la cabeza al verla. Veamos en que consiste.



Pues bien, desde pequeños hemos visto películas tipo American Pie (uno, dos, tres…) y series como Smallville, Sensación de vivir… Pues bien, dejando bien clarito que soy, y he sido muy feliz con mi infancia española hay ciertos estereotipos americanos que me hubiera encantado vivir. Sip, te hablo de esas películas y series de instituto. Vamos a situarnos: no hemos tenido una infancia fácil, nuestros padres lamentablemente se han separado y nos pasamos nuestra vida constantemente cambiando de casa, instituto y amigos por culpa del trabajo de nuestra madre. Nuestro hermano pequeño está encantado con los ires y venires y siente admiración por nosotros pero empezamos a estar cansados de tanto cambio. Sólo hay una cosa que se nos da francamente bien: el fútbol americano. Hemos crecido viendo vídeos de Joe Montana y es lo que aspiramos a ser. Ni que decir tiene que somos uno de los quarterbacks mas prometedores de EEUU, pero con tanto cambio de instituto apenas nos da tiempo de llegar a un sitio, que nos acepten y ganarnos el puesto. Ésta última vez no va a ser diferente, porque mientras recorremos el pasillo del nuevo instituto chocamos justamente con una preciosa dama, haciendo caer sus apuntes de biología de primero, con tan mala suerte que esta chica, llamémosla Cindy es la jefa de animadoras de los Crows y su novio resulta ser el impresionante Dylan, quarterback titular del equipo de fútbol. Tendremos que hacernos amigos de los marginados del colegio: el típico freak de los videojuegos, la típica chica cuatro-ojos vestida como una madre y el típico feo pero simpático colega alternativo. Durante algunas semanas, intercambiamos algún que otro comentario gracioso con Cindy,lo que justamente, Dylan llegando en su flamante Jeep Wrangler negro, presencia al llegar al instituto. Los primeros días en el equipo serán nefastos porque tanto Dylan como su coleguitas nos darán pal pelo a base de placajes innecesarios. Aquí va el primero de los momentos que me ha faltado por vivir: la final del campeonato nacional de institutos.



El campo está rebosante de gente. Padres de alumnos, hermanos y hermanas y novias braman y chillan desde las gradas. Las animadoras ya han hecho su numerito y nos fijamos que nuestra madre y hermano nos vigilan desde la grada. Lamentablemente sabes que no vas a jugar. No has tenido apenas oportunidades en todo el año. El partido comienza y todo transcurre con normalidad hasta que Dylan, el quarterback mas guapo, mas fuerte y mas capullo cae lesionado por un golpe en la rodilla. “It´s your turn, don´t screep up!” te dice el entrenador al oído. Ni que decir tiene que justo a falta de pocos segundos conseguimos el “touch down” de la victoria, uno de esos momentos a camara lenta donde decides correr en vez de lanzar el pase y que justo en la linea de puntuación dos moles nos placan, pero ya es tarde, Touch Down baby!!!!,y que Cindy desde la lejanía nos mira con curiosidad y quizá algo más.Ese mismo finde, y aquí viene el segundo de los clichés que me hubiera gustado vivir, en una de esas fiestas donde los padres del forrado Kevin se han ido a Santa Barbara a pasar el finde, abarrotada de gente con gorras con pajita y cerveza, chupitos encima de cuerpos de tias en ropa interior mojadas por el alcohol y la piscina, guerras de a beber quien bebe mas cerveza y de pulsos. Nos encontramos que Dylan nos deja en ridículo y encuentra la excusa perfecta para darnos una paliza ante las risas del resto. En ese momento es cuando Cindy viene a levantarnos del suelo, y nosotros con nuestro labio ensangrentado le decimos “estoy bien, déjame” y nos alejamos entre la muchedumbre. Algo ha cambiado y Cindy se da cuenta de lo estúpida que es por estar con un chico como Dylan, además algo esta empezando a sentir por ese quarterback recién llegado que tiene esas grandes dosis de humor. Discuten y todo termina con un “piérdete” de Dylan a Cindy cuando esta le dice que es un capullo.



Pues bien, porque llegamos a lo que quiero invitarte, y al tercero de los clichés: el baile de fin de curso del instituto. Obviamente tu madre ya sabe que estas completamente enamorado de esa preciosa chica que ha venido tantas veces a casa a estudiar. Ha oído desde el salón las risas en el cuarto de su hijo tantas veces…No, no vamos a ir a ese estúpido baile. Nuestro querido y freak amigo “Dunddle” toca a la puerta y nos dice, “vamos colega, vamos a divertirnos, salgamos, emborrachémonos…además Cindy va al baile…uuuuuuuuuuuuhhhh”. Nuestra madre casi nos tiene que poner el traje y la pajarita obligándonos a asistir al evento, al que accedemos a ir ante la persistencia de nuestro colega. Llegamos al baile en taxi. Las limusinas, y coches descapotables se agolpan en la entrada. Llegamos y nos servimos un ponche. La gente baila haciendo ridículos bailes al estilo techtonik y nosotros nos limitamos a apoyarnos en una columna y mirar al personal. Entonces llega ella, vestida de un impresionante vestido color arena ;) largo hasta los pies, de un solo tirante y con la espalda completamente al aire, pasea su mirada por el recinto, te das cuenta que las princesas de los cuentos de hadas existen y que tienes delante de tus ojos a la mas bella de cuantas existieron…no viene acompañada,no sabemos porque su estúpido novio no la lleva del brazo. Evitamos mirarnos en toda la fiesta. La nombran reina del baile y lamentablemente nombran a Dylan rey. El ardor del odio nos quema por dentro asi que decidimos acercarnos a la barra a por otro poquito de ponche. De repente, las luces cesan, y un solo foco de luz apunta directamente a la gran bola de espejos que cuelga del techo reflejando multitud de diminutos puntos de luz por la pista de baile. Un “hola” nos sorprende y apuntito estamos de tirarnos el ponche por encima, cuando descubrimos que Cindy esta delante nuestro. La banda interpreta “Closing Time” de Semisonic ( http://www.youtube.com/watch?v=xGytDsqkQY8 ) . Nos coloca correctamente la pajarita y nos dice, “estas muy guapo ésta noche” a lo que nosotros solo acertamos a contestar “tu también estas muy guapo…, eh …guapa…preciosa quería decir”, “Gracias” nos dice con un golpe de cabeza mientras nos sonríe… “ y ahora me sacas a bailar por favor?”.



 La música es lenta, y debemos acercarnos a apenas unos centímetros el uno del otro mientras nos embriaga el olor de su perfume…ese momento mágico, de acompasados movimientos, de felicidad al tenerla entre tus brazos, al tenerla tan cerca…la canción termina, y el calor del ponche y que demonios (WTF) del momento  le hace pedirte que la acompañes fuera. La acompañamos y sigue sonando la música en el interior, esta vez suena “ you found me", de The Fray ( http://www.youtube.com/watch?v=jFg_8u87zT0&ob=av2n ) . Nos dirigimos a una pequeña pérgola que se encuentra sobre el mar, en el muelle. Descubrimos una parte de Cindy que no conocíamos. Seguimos hablando mientras ella nos coge y nos hace bailar sobre el agua, y pensamos en el ridículo que estamos haciendo si alguien nos viera en ese momento, pero ese pensamiento se esfuma cuando nuestra mirada se fija en sus labios, y justo en el momento adecuado... ya sabes lo que sigue… ( http://www.youtube.com/watch?v=Sb1G2JlrDF8  tendrás que pinchar aquí para descubrir la canción). Y Fin. Vale, vale...acepto que es demasiado tipico, pero que quieres que le haga, son cosas que me hubiera encantado vivir, y mi pregunta ahora es, y por qué no? Así que pensándolo bien, he decidido aun sin fecha ni lugar concretados...pero voy a celebrar una fiesta americana. De obligatoria asistencia con traje y pajarita para ellos, y vestido largo de noche para ellas, rey y reina del baile, música en directo (o al menos, una cuidada selección de música para tal noche), ponche y bola de discoteca en lo alto. Ni que decir tiene que cada uno puede montarse su propia pelicula. Se deberá ir acompañado, aun no siendo obligatorio. Yo, por mi parte se que terminaré besando a "esa" preciosa Cindy, esa Rapunzel de cabellos castaños bajo el embrujo de la luna, seras tu?;). No seas tímid@ porque sé que sientes curiosidad por esa fiesta, asi que la cuestión es, querrás venir?

Infielmente tuyo, Carlos Torralba

Pd: quien me conoce sabrá que la musica estará a la altura del evento, que no faltará ponche, ni ron, ni ginebra, ni martini...no faltaran mujeres en trajes increibles ni hombres de estampa varonil. No dudes en indicarme tu asistencia, para ir teniéndolo en cuenta, nos vemos en la fiesta...

Pd2: "Good Job, Sebastian, Good Job..."

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